- A lo largo de este mes finalizarán las obras de adecuación del edificio y la zona exterior donde acudirán los alumnos de la escuela infantil y del servicio de atención temprana.
- Continúan los trabajos en las instalaciones junto a la ladera del río tras el colapso de parte de la galería y las filtraciones en el subsuelo del pasado mes de junio.
Las brigadas municipales ya han comenzado los trabajos de adecuación del Instituto de la Palmeral para acoger a partir del 1 de septiembre a los niños de la escuela infantil y el servicio de atención temprana de la Fundación Salud Infantil, tras el colapso de parte de la galería y las filtraciones en el subsuelo que se produjeron el pasado mes de junio en las instalaciones ubicadas junto a la ladera del río y que obligaron a desalojar a todos los alumnos.
El gobierno municipal ha decidido habilitar este edificio para que los niños puedan iniciar su actividad con normalidad el próximo día 1 de forma provisional, al menos durante este curso. El edil de Servicios Públicos, Claudio Guilabert, y la edil de Educación, María Bonmatí, han visitado esta mañana las instalaciones para conocer el estado de los trabajos que llevan a cabo principalmente las brigadas municipales, aunque algunas actuaciones concretas se realizan a través de contratos menores. “Este gobierno municipal está demostrando el compromiso de que todo lo que nos proponemos, los estamos realizando en tiempo récord, al adecuar lo que era un laboratorio en una escuela infantil”, ha subrayado Guilabert.
Según el edil del área, se están adecuando los espacios para convertirlos en aulas, también los aseos para adaptarlos a los más pequeños, además de la parte exterior del edificio donde se instalarán zonas de juegos infantiles en patios diferenciados.
Al mismo tiempo, se sigue valorando la situación técnica de las instalaciones de la Fundación Salud Infantil en la ladera del río. “Ya se han realizado los trabajos de adecuación de la galería para que el flujo de agua salga con normalidad, y ahora quedan las obras de estabilización de la parte inferior, que es un proceso más largo y costoso, de ahí que se haya optado por esta alternativa temporal”.
En este sentido, Guilabert ha afirmado que “si a lo largo del año se resuelve esta situación, de cara al siguiente curso se pensará si los alumnos vuelven a las instalaciones junto a la ladera del río o se trasladan al nuevo centro que está proyectado en una primera fase en el entorno de San Antón”.
